Esta entrada está dentro del Taller de la Autoestima. Recuerda trabajar lo aprendido en la semana 1: Reconoce tus logros y cualidades , la semana 2: Aprende a darle la importancia justa a las cosas y la semana 3: Aprende a hacer autocrítica
El objetivo de esta semana es aprender a relacionarte de una forma saludable con los demás, a ser asertivo. Exprésate con amabilidad.
Los tres estilos de comunicación
A la hora de comunicarnos con los demás, se habla de un continúo por el que nos movemos constantemente, existiendo tres estilos de comunicación: pasivo, agresivo y asertivo,
Lo primero a tener en cuenta es que ninguno de estos estilos es malo o bueno en sí, si no que te ayudará a alcanzar tus objetivos o te dificultará esta labor, por eso es importante que sepas cuándo usar cada uno de ellos.
Imagina que un ladrón te amenaza con un cuchillo, lo más sensato será darle la cartera sin discutir; En este caso, el estilo de comunicación pasivo es el más adecuado.El estilo de comunicación pasivo es aquel donde se respetan los derechos de los demás por encima de los propios.
Imagina por otro lado un profesor intentando dar clase con unos alumnos revueltos y ruidosos, tendrá que alzar la voz para hacerse oír y mandar callar para poder impartir esa clase, en este caso el estilo de comunicación agresivo será el más conveniente. El estilo de comunicación agresivo es aquel en el que al comunicarte, impones tu criterio por encima del criterio de los demás.
Sin embargo, en general, si la persona es importante para ti, ya sea a nivel personal o profesional, lo más interesante es mantener una relación donde ambos os sintáis a gusto. Esto se logra mejor con un estilo de comunicación asertivo
El estilo de comunicación asertivo es aquel en el que expresas y defiendes tu criterio respetando los derechos del otro.
En la medida en que la otra persona conozca tus límites y necesidades, podrá respetarlos y adecuarse a ellos. Tú te sentirás mejor con esa persona y esa persona contigo. Sucede en multitud de ocasiones que por evitar el conflicto, se genera un malestar que distancia y enfría esta relación y que muchas veces acaba en enfado, es por eso que la asertividad será una herramienta que enriquecerá tu relación con los demás y tu autoestima al comprobar que incluso con opiniones distintas, tu entorno te acepta.
¿Cómo ser asertivo? 4 pasos a seguir:
1. Escoge bien el momento
Para expresar tu opinión, asegúrate que ninguno de los dos estáis disgustados o enfadados, sino receptivos y de buen ánimo. Si no es el caso, será preferible posponer la conversación
2. Escucha al otro
Hazle saber que te interesa su opinión. Para ello, puedes preguntar sobre lo que te está comentando, añadir observaciones al respecto, mostrar tu acuerdo a través de gestos como asentir. Muestra interés
3. Usa mensajes «YO».
Habla en primera persona, será la forma en la que expreses tu opinión sin agredir al otro. Además si lo acompañas con verbos que expresen emociones , la otra persona será capaz de entender mejor cómo te encuentras.
4. Usa un lenguaje concreto y preciso.
Esto facilitará que la otra persona sepa bien qué es lo que te ha disgustado o lo que le quieres trasmitir.
Prueba esta semana a usar estos trucos con la gente de tu entorno, comprobarás como no sólo no se molestan si no que comenzarás a sentirte mejor con ellos y contigo mismo. Hacerte valer en tu entorno influye de una forma directa y muy positiva en tu autoestima
Advertencia: para tener una actitud asertiva primero habrás de aceptar tus propias emociones, si algo te gusta o te enfada. Aceptarlo, darlo por válido e identificar qué necesidad tienes por cubrir. Cuando hayas hecho este ejercicio de aceptar lo que sientes, dale una salida asertiva, expresando tu opinión respetando la del otro.
¡Exprésate!
¡Muy buen artículo!
Saludos
¡Muchas gracias Ivonne!